Bien..., me voy a saltar una vez más el orden establecido ya que hoy me tocaba hablar de la Navidad.
Aunque el tema que expondré a continuación se parece en cierto modo a esta "feliz" época del año.
Hoy hablaré sobre la falsedad del ser humano.
Aunque afirmemos con rotundidad y con una fe ciega que tenemos amigos a los que contamos todo, eso no es así exactamente.
Por naturaleza, y como medio de defensa, intentamos esconder nuestros miedos e inconscientemente también escondemos opiniones,recuerdos,imágenes...
Si cada uno hacemos esto, ¿Cómo va a existir una verdadera amistad sincera, una verdadera relación sin falsedad?
Tendemos a esconder lo que nos reconcome y lo único que provocamos es una realidad virtual, en la que a nadie aparentemente le sucede nada.
Además, cada uno poseemos una moral con la que actuamos y juzgamos sobre si algo está "bien" o "mal". Deberíamos tener una distinta cada uno, deberíamos.
En estos últimos días estoy encontrando patrones de conducta iguales o muy semejantes entre la gente que me rodea, supongo que será cosa de los medios de comunicación, o de una sociedad que aún recuerda momentos en los que no hubo libertades, o de prejuicios impuestos desde pequeños, sinceramente no lo sé.
Lo cierto es que, yo también oculto mis inquietudes, pero las saco a luz en forma de canciones. Es la única forma de purificarme por dentro, es mi propia katharsis.
He introducido a la moral en esta entrada por una sencilla razón, si tu estás fuera de ese círculo que piensa distinto o que tiene unos principios propios que no se ajustan a lo que la sociedad dicta, eres un tío raro.
Sé que algunos que me abrazan a veces como si fuesen mis hermanos, a mis espaldas tiran piedras sobre mis hombros y mi tejado. Pero, aunque ellos no lo crean, sé distinguirlos.
No sé si es porque no tengo unas pautas definidas de conducta o es que la gente no las comparte, pero en el fondo les entiendo, lo raro o diferente siempre ha sido visto con malos ojos en la sociedad, pero prefiero ser libre a un esclavo sin pensamientos o un simple títere.
Yo tengo mi propio criterio, a quien no le guste, es lo que hay.
Gonzo
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